El minoxidil surgió en la década de los 60’s siendo un agente químico que se encargaba de tratar la presión arterial alta. Pero seguramente te preguntas cómo es que esto pasó, aquí te vamos a contar; Durante mucho tiempo el Minoxidil fue utilizado para tratar a pacientes con presión alta ya que permite una mejor circulación en la sangre por medio del torrente sanguíneo, usándose como un vasodilatador para facilitar el transporte de la misma, y el único problema que se había encontrado con este tratamiento era que salía vello en ciertas superficies de la piel, el tratamiento se administraba vía oral no se aplicaba como crema o gel.
Se han hecho estudios científicos que apuntan al minoxidil como un estimulante de los folículos pilosos dando paso al crecimiento de barba; muestra de sus resultados, son los miles de hombre utilizándolo y recibiendo resultados inimaginables. La mayoría viendo crecer vellos en las zonas aplicadas después de un tiempo, cabe recalcar que ese tiempo es cuestión de meses o hasta años para algunos
Se recomienda que el minoxidil no supere el 5% pues esto puede tener efectos secundarios en la cara y salud, así que lo mejor sería no superar este porcentaje. El minoxidil es un tratamiento muy efectivo, que para conseguir mantener su efecto requiere constancia y regularidad.
MODO DE USO
Aplica cada 12 horas (mañana y noche) sobre la piel seca y limpia con una periodicidad diaria. El minoxidil debe permanecer sobre la piel, al menos 6 horas antes de un nuevo lavado.
Debe mantenerse de forma continua, empezando a percibir efectos a partir de 4 a 6 meses.
Es muy importante mantener el tratamiento a largo plazo, de lo contrario, si se suspende, la situación de densidad capilar poco a poco vuelve en 2-3 meses a como estaba antes de empezar el tratamiento.